Vivir en realidad es hacer tiempo hasta que nos pasan cosas diminutas, geniales, que nos ilusionan, detalles que nos envuelven entre nubes, o momentos duros en los que tenemos que tomar decisiones.

Y aunque nos parezca en el momento que hemos pecado de atrevimiento, con el tiempo nos damos cuenta de que hasta los fallos tienen parte positiva si sabemos encontrarla. Aunque sólo sea porque después de todo, sientes que eres más fuerte que antes. Eso que has ganado. Que hemos ganado.

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