La velocidad con la que malgasto caminos. Las despedidas que no llegaron a suceder. Mis ganas de que llueva y de no llevar paraguas en esta imaginaria ciudad. No quiero verte, no me quieres y no quiero verte. Pero no quiero dejar de recordarte. La velocidad con la que al pasar por los lugares que compartimos soy capaz de quererte. Mucho más, mucho más de lo que quisiera quererte. Porque te quiero. La velocidad con la que mis ojos se aguaron ayer. Ahora. Mañana. La velocidad con la que todo sucede. La velocidad con la que no te echo de menos. Dicen que no se puede echar de menos a alguien que no merece ser recordado. Yo no te echo de menos a ti, echo de menos que no llegaras a ser lo que necesitaba que fueras...
No te culpes
Voy a empezar dando un mensaje muy claro: no todos los celos que sentimos son porque tenemos que gestionar algo en nosotras . Y punto. Está muy guay el rollito este "new age" moderno de que los celos son inseguridades propias, falta de autoestima etc. En la mayoría de los casos es así, y está claro que cuanto más trabajemos nuestro crecimiento personal mejor estaremos. Pero los celos son una respuesta del cerebro que lo que busca todo el rato es sobrevivir. Y señoras, amigas, hermanas, en muchas ocasiones tenemos celos porque nuestra pareja está siendo infiel, porque otra persona se está entrometiendo en la relación o porque hay algo que no cuadra. Y PUNTO. Esto es algo que resumió mi psicóloga muy bien cuando tuve el mayor ataque de celos que he tenido nunca, recuerdo bastante bien sus palabras: “No tienes celos porque estés insegura, tienes celos porque esa chica sigue enamorada de tu novio y claramente está compitiendo contigo para conseguirlo”. ...
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