No paro de decirme lo mismo, que deje de leer las páginas pasadas de mi vida. Que viva el día a día que es lo que realmente es importante.
Pero aunque yo ya no base mis miedos en el pasado, es inevitable que eche la vista hacia atrás. Asomando la cabeza en lo que alguna vez sentí, lo que alguna vez de una manera u otra fui.
Y no es que me duela porque sí, solamente creo que no lo comprendo del todo y por eso me duele. La frustración es uno de los peores venenos para mi.
Y es lo que siento ahora mismo: frustración.
Estoy al borde de un abismo del que me pienso tirar. Que ya es hora.
Y no pienso hablar de heridas, ni cicatrices, ni nada por el estilo. Porque estoy cansada de toda esa mierda. Porque no es más que una soga que se ata a mi cuello apretando cuando quiero saltar.
Y aunque yo no quiera saltar, me empujan.
No te culpes
Voy a empezar dando un mensaje muy claro: no todos los celos que sentimos son porque tenemos que gestionar algo en nosotras . Y punto. Está muy guay el rollito este "new age" moderno de que los celos son inseguridades propias, falta de autoestima etc. En la mayoría de los casos es así, y está claro que cuanto más trabajemos nuestro crecimiento personal mejor estaremos. Pero los celos son una respuesta del cerebro que lo que busca todo el rato es sobrevivir. Y señoras, amigas, hermanas, en muchas ocasiones tenemos celos porque nuestra pareja está siendo infiel, porque otra persona se está entrometiendo en la relación o porque hay algo que no cuadra. Y PUNTO. Esto es algo que resumió mi psicóloga muy bien cuando tuve el mayor ataque de celos que he tenido nunca, recuerdo bastante bien sus palabras: “No tienes celos porque estés insegura, tienes celos porque esa chica sigue enamorada de tu novio y claramente está compitiendo contigo para conseguirlo”. ...
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