no queiro más sapos diciendo ser alguien que nunca llegarán a ser, no existen los encantos cuando no son ciertos, ni las palabras dichas cuando no se sienten, ni las caricias dadas cuando el simple roce de tu piel contra la mía nos va alejando un poco más, no quiero sapos que revelen una futura vida en rosa, nunca me gustó ese color, ni las falsas promesas.

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