A medida que vamos creciendo aprendemos que hasta la persona que se supone que nunca te defraudaría, probablemente lo haga; que te romperán el corazón y que tu también romperás algunos... Que puedes llegar a pelearte con ese mejor amigo, y que después de jurarte mil cosas tal vez acabes enamorada de él...
Pero al final de todo, y seguramente demasiado tarde, aprendemos que el tiempo pasa volando.

Así que saca miles de fotos. Perdona sin rencores y ama como si nunca te hubieran herido; la vida viene sin garantías, hay que vivirla al máximo. Tomando riesgos, pues de eso se tratan las experiencias ... Hay quien dijo que quién no juega, nunca gana.

Habla de lo que quieras sin tener miedo alguno, quédate dormido cuando quieras y donde quieras, baila en plena lluvia, innova, decide, déjate vencer por ese impulso, pierde por un momento la cabeza... Y vuelve a por ella.

Quédate despierto hasta tarde, duerme hasta que te despierte el sol, ríete hasta que te duela la cara, improvisa momentos, planifica otros tantos, comparte, sueña...

Y vuelve a soñar.

No tengas miedo de esforzarte por lo imposible, atrévete a enamorarte... Y lo más importante de todo: vive cada momento, cada segundo, porque cada instante que gastas estando molesto o triste es un segundo de felicidad que NUNCA REGRESARÁ...

Y que vale oro.

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